Encontrar el equilibrio perfecto entre la vida laboral y la personal es algo que cualquier trabajador desea conseguir y debería ser una gestión fácil que no supusiera quebraderos de cabeza. Actualmente, existe una preocupación por parte de las empresas por brindar condiciones que sean más favorables y permitan gozar de ambos espacios de forma sencilla.
No mantener ese equilibrio desencadenará en estrés laboral, perdiendo productividad por falta de descanso emocional, tan necesario para mantener los niveles de trabajo a los que hoy en día nos vemos sometidos.
Mantener ambos aspectos de tu vida separados es importante y totalmente aconsejable, por lo que dejar en la oficina los asuntos de trabajo será imprescindible a la hora de poder disfrutar de tu tiempo personal con tu familia y amigos, olvidando los problemas o el cansancio de esa tarea que tanto tiempo te costó llevar a cabo.
Siguiendo la misma línea, es importante desconectar en vacaciones y disfrutar del tiempo libre cuando lo tenemos. Las Navidades son días para disfrutar de los tuyos y reencontrarse con amigos, para descansar y desconectar de todo lo demás. Hacer planes, disfrutar de las luces navideñas, organizar cenas en las que se reúne toda la familia… Dedicar tiempo también para ti y lo que te hace feliz te hará volver al trabajo con muchas más fuerzas.
Un buen programa de recursos humanos ayudará a mantener ese equilibrio en sus trabajadores, gestionando los días de vacaciones, e incluso proponiendo un límite a las horas de trabajo extra que realice cada empleado, siendo remuneradas o compensadas en horas disponibles para asuntos personales. También, ofrecer un horario flexible para poder pasar tiempo con la familia si el trabajo de ese día ya ha sido concluido, puede ser algo muy positivo para el empleado y para la empresa, ya que se sentirá mucho más despejado y lleno de energía para retomar sus tareas al día siguiente.
Debemos tener clara cuál es nuestra prioridad, y es que, al final, somos nosotros mismos los que decidimos si vivimos para trabajar o trabajamos para vivir.