Las habilidades son el vínculo entre el rendimiento de los individuos y el crecimiento de una organización, por lo que mantenerse a la vanguardia significa asegurarse de que los empleados desarrollen sus habilidades y alcancen sus propios objetivos.
Las habilidades adecuadas para desenvolverse en cualquier situación, desde los rápidos avances tecnológicos hasta las necesidades cambiantes de los clientes, preparará a las organizaciones para el futuro. Esto también garantizará que el talento supere sus objetivos, manteniéndolo motivado y comprometido.
Según nuestro informe del Índice de Salud de la Gestión del Talento 2023, el 41 % de las personas cree que necesita más recursos para desarrollar su habilidad. Al integrar a la perfección el desarrollo de habilidades en los diálogos regulares sobre el rendimiento, las empresas y los empleados pueden trabajar juntos activamente para lograr sus objetivos y desbloquear un crecimiento ilimitado.
ELos empleados anhelan el desarrollo y el éxito, y las organizaciones deben ofrecerles las oportunidades adecuadas para fomentar su formación y su crecimiento. También quieren que su desarrollo profesional sea colaborativo, puesto que cuando cuentan con un superior que les apoye en lo profesional tienen el doble de probabilidades de permanecer en la organización.
Un programa de habilidades es la chispa que enciende el crecimiento y el éxito de la organización, por lo que identificar y cerrar la brecha de habilidades mejorará el rendimiento de los individuos, además de aumentar los ingresos, impulsar la productividad y aumentar los niveles de eficiencia. A la hora de enfrentarse al cambio, el empleado mejorará su adaptabilidad, agilidad y resiliencia. Además, fomentar su desarrollo encajará con la visión de la organización. Comprometer y satisfacer al empleado garantiza la retención.
Los líderes de RR. HH. necesitan una visibilidad clara y coherente de la forma que tiene su talento de desarrollar sus habilidades. Con el mundo laboral en constante cambio, pueden suceder muchas cosas en solo un mes, lo que significa que las revisiones rígidas, anuales y basadas en el cumplimiento ya no son suficientes.
La creación de un proceso dinámico y orientado al desarrollo comienza con una ontología de habilidades. Esto proporciona un conjunto único de habilidades con conexiones definidas con otras habilidades o entidades, y permite crear una base de datos de habilidades fluida y dinámica.
A medida que evoluciona una ontología, se vuelve más inteligente y recopila más datos, por lo que se integra la inteligencia artificial (IA) para automatizar y ampliar un programa de habilidades. Así se ahorran tiempo y recursos. Además, se garantiza que los datos sean pertinentes y estén actualizados para realizar un seguimiento del crecimiento y el desarrollo.
Además de implementar una ontología de habilidades, las organizaciones también pueden introducir la evaluación continua y colaborativa. Estas oportunidades fomentan un crecimiento y una mejora más significativos, con cuatro componentes clave:
- El establecimiento de objetivos ágiles crea un personal ágil. Garantice un seguimiento cuantificable de los objetivos y revíselos con frecuencia para realizar los ajustes y reajustes necesarios.
- Las conversaciones sobre el rendimiento también deben ser periódicas, ya sean mensuales o trimestrales. Estas reuniones de seguimiento garantizan que se siga priorizando el desarrollo de habilidades para que su el empleado persista en sus objetivos. Las oportunidades de formación y desarrollo pueden mejorar el rendimiento y paliar el bajo rendimiento.
- El feedback de 360° ofrece una visión integral de los éxitos y áreas de mejora de un empleado. Luego, puede proporcionar coaching específico para acelerar el desarrollo.
- Las oportunidades de crecimiento personalizadas, como las tareas que suponen un reto y los gigs, desafiarán y empoderarán al talento a medida que despliega sus nuevas habilidades.
A lo largo de los años, el aprendizaje se ha vuelto más interactivo y personalizado. También se ha ampliado para incluir oportunidades de formación experiencial, ya que el 82 % de las empresas invierten en esta modalidad de formación. Una variedad de recursos y oportunidades de aprendizaje significa que el empleado puede adquirir y retener mejor distintas habilidades.
La gestión del rendimiento debe interrelacionar las habilidades con la formación para que vayan siempre de la mano. Alinear el desarrollo de habilidades con las aspiraciones de los individuos involucrará y motivará mejor a sus trabajadores, y una trayectoria de desarrollo personalizada empoderará al talento para tomar las riendas de su aprendizaje y crecimiento. Además, vincular las conversaciones sobre el rendimiento con los objetivos de formación impulsará debates más significativos sobre el desarrollo de habilidades.
Interrelacionar las habilidades y la formación con el rendimiento también significa practicar la escucha activa, hacer preguntas de gran alcance a los empleados, llevar a cabo reuniones de seguimiento frecuentes y realizar un seguimiento del progreso. Al hacerlo, tendrá una comprensión integral de las habilidades de los empleados y de cómo van a crecer tanto ellos como su organización.
Consolidar las habilidades como el vínculo entre el rendimiento y el crecimiento significa adoptar una mentalidad que dé prioridad a lo interno a la hora de buscar talento. El 35 % de los empleados que reciben oportunidades de desarrollo de habilidades avanzan internamente, lo que enfatiza que los empleados quieren cosechar los frutos de sus esfuerzos. Los ascensos desempeñan un papel importante en el empoderamiento del personal y en el impulso de la satisfacción, el compromiso y la retención.
La movilidad interna es igualmente beneficiosa para las organizaciones. La búsqueda de talento interno reduce el tiempo y los costes de la contratación e incorporación externa, y los empleados existentes ya están adaptados a sus procesos, visión y cultura. Aprovechar una reserva de talento existente también maximiza el valor y el potencial del personal al fomentar la movilidad interna y la agilidad. En este punto, las herramientas adecuadas resultan fundamentales, e invertir en una solución como Opportunity Marketplace agilizará el proceso de movilidad interna para usted y sus empleados. Usted tiene la oportunidad de retener a su mejor talento, y sus empleados sentirán que tienen un propósito y vivirán sus logros. ¡Todo el mundo sale ganando!
Para prosperar en el presente, mire al futuro. Sus empleados son su activo más valioso, e invertir en su desarrollo y crecimiento allanará el camino para el éxito de su organización. Cuando una empresa se concentra en cultivar habilidades internamente, se crea un potente vínculo entre un alto rendimiento y un potencial infinito. Una trayectoria profesional clara dentro de la empresa hace que los empleados sean más propensos a quedarse, al sentirse valorados y motivados. Reconocer sus esfuerzos por aprender y crecer con oportunidades reales de progreso crea un vínculo inquebrantable. Con este enfoque se ahorran tiempo y recursos en la contratación y se aprovecha la reserva de talento existente, lo que hace que la formación sea una parte natural de la cultura laboral.
Para obtener más información sobre cómo fomentar el crecimiento del personal a través de las habilidades y el rendimiento, descargue nuestro libro electrónico aquí.
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